Permanente tedio, beber una cerveza en un bar, observar la frialdad del resto y, finalmente, experimentar la impunidad de personas que siempre se salen con la suya son algunos de los momentos de la vida de Ruth. Ya no me siento a gusto en este mundo plantea estas situaciones desde la experiencia de una mujer anónima y solitaria. Ruth (Melanie Lynskey) es una persona común y corriente, y tiene una vida en la que cuenta las horas, si bien ésta no va hacia ninguna parte. El director Macon Blair profundiza en la idea de lo mundanal, espacio desde el cual y en ciertas ocasiones surge lo extraordinario.

A la neozelandesa Melanie Lynskey la recordamos por aquel oscuro rol de asesina fantasiosa en Criaturas Celestiales (1994, Peter Jackson) junto a Kate Winslet. En dicho filme, Lynskey demostró capacidades interpretativas interesantes, si bien nunca despegó del todo a diferencia de su coprotagonista, quien con Titanic y otros roles se posicionó como una de las actrices más reputadas de la actualidad. Sin embargo, Lynskey sobrevivió durante la última década con roles en la serie Two and a Half Men y en filmes de Soderbergh (El Informante) y de Jason Reitman (Up In The Air). Ahora con Ya no me siento…retorna a la primera línea en un filme modesto, independiente y de mucho encanto. A partir de un robo la vida de Ruth comienza a complicarse, pero también surge la oportunidad para producir cambios y para imponerse. En la obra de Macon Blair se puede identificar fácilmente algunos guiños a la filmografía de los hermanos Coen (Educando a Arizona), en donde lo absurdo también tiene un sentido y un propósito. En la superficie abunda la comedia negra, pero bajo esta capa hay otras ideas en torno a la soledad.


Ya no me siento…nos conecta con otros filmes como Lars y la Chica Real y The Visitor porque son filmes que se sustentan en personajes alienados en sus propias rutinas. Lo anterior en una sociedad artificial y desprovista de propósitos, y en la cual la empatía ya no es una cualidad, sino un valor en sí misma.

El principal imán del filme es Lynskey, quien en su pequeña rebeldía social se hace más auténtica e individual. Ya no me siento a gusto en este mundo es un mensaje sobre la indolencia en medio de personas desconectadas y que han perdido el interés de conectarse con otros. Es fácil reírse en varias de sus escenas, pero también se trata de un filme que te deja un sabor amargo en la boca. Esto sucede porque muestra una realidad en la que mueren individuos en forma paradójica. Ya no me siento…habla justamente del no sentir, del entumecimiento personal hasta cuando se vive de a dos, aún si ello implica enfrentarse a todos los demás. Estamos ante una obra con varias relecturas en medio de su simplicidad técnica y que está ahí para ser descubierta en Netflix (estudio que con títulos como Spectral y Beast of no Nation está demostrando una calidad superior al momento de escoger sus proyectos). No es casual que la obra de Macon obtuviese el Gran Premio del Jurado en el Festival de cine de Sundance. Ojo con Elijah Wood, quien se saca de encima la candidez del Frodo de El Señor de los Anillos para interpretar un personaje totalmente atípico a su filmografía.

Título original: I Don´t Feel at Home in This World Anymore / Director: Macon Blair / Intérpretes: Melanie Lynskey, Elijah Wood, Chris Doubek, Marilyn Faith Hickey, Gary Anthony Williams, Jeb Berrier y Lee Eddy / Año: 2017.