El director austro-húngaro Otto Preminger fue uno de los precursores del cine negro estadounidense con películas como Laura y Whirlpool. Su filmografía también apuntó a otros géneros gracias a obras de mayor envergadura como Buenos Días, Tristeza; Anatomía de un Asesinato y Exodus; y desde un terreno un poco más independiente realizó joyas como Bunny Lake is Missing. En gran parte de estas películas contó con la colaboración del diseñador gráfico, Saul Bass, quien revolucionó la utilización de los créditos al considerarlos como una extensión narrativa y visual de las películas.
En los primeros minutos de El Hombre del Brazo de Oro vemos líneas blancas imperfectas. Éstas representan la vida de Frankie Machine (Frank Sinatra), un ex convicto que durante seis meses en prisión logró enmendarse, a la vez que aprendió un talento desconocido en torno a la música. Durante su condena también consiguió combatir su adicción a la heroína. Para Frankie las oportunidades están a la vuelta de la esquina y para alcanzarlas sólo basta con no dejarse tentar y seguir adelante. Sin embargo, su ámbito social pertenece al terreno del lumpen, del crimen de poca monta, cuya escenografía es la de clubes, bares y departamentos que destilan pobreza junto con varias tentaciones.
Frankie tiene una esposa inválida y demandante, además de “amigos” usureros y estafadores que lo arrastran hacia el juego. Es el mundo de las faltas ambientado con sonidos que evocan los lamentos del jazz. Machine tiene aptitud y actitud para la batería, así como sentimientos vinculados con la culpa y la frustración que son difíciles de controlar. Preminger transmite una suerte de determinismo social. Es así que Frankie tendrá que tocar fondo en medio de la desesperación de alguien que sólo será apaciguado por la heroína en su brazo.
En 1946, Billy Wilder dirigió una de las cintas más precisas sobre el alcoholismo. Días sin Huella (1945) mostraba como Ray Milland se hacía pedazos producto de su adicción por la bebida. En El Hombre de El Brazo de Oro tiene una premisa similar, a la vez que fue una de las primeras películas de Hollywood en mostrar lo que significa ser, vivir y pensar como adicto. Frank Sinatra realiza una de sus mejores actuaciones (De Aquí a la Eternidad, El Candidato de Manchuria). En sus filmes de los años 60 como Once a la Medianoche y Von Ryan Express se notaba demasiado consciente de su fama. En cambio, en el filme de Preminger consiguió crear un personaje con distintas dimensiones. Su Frankie Machine puede ser optimista, talentoso y bonachón, si bien en la adicción a la heroína tiende a ser una persona derrotista, desesperada y obsesionada con una droga que finalmente pone su vida en pausa.
El Hombre del Brazo de Oro está muy conectada con la cadencia del jazz de sus escenas. Precisamente, Frankie Machine es el músico que busca el éxito y reconocimiento siempre esquivo. Su rabia se expresa en su adicción. Preminger plasmó el sueño americano desde la fealdad y excesiva glorificación. En el filme los que triunfan o tienen un buen pasar es porque se dedican al robo, al crimen de poca monta que da mucho y que después cobra con intereses.
Otto Preminger siempre supo qué esperar y cómo dirigir a sus actores. A esto se suma su habilidad para montar escenas con mucho ritmo e interesantes movimientos de cámara. El Hombre del Brazo de Oro conmueve por Frank Sinatra, por su mirada de soñador que después se pierde en el egoísmo de las adicciones. A su lado está Molly (Kim Novak), su única amiga. Es el amor platónico que por circunstancias del medio social antes mencionado resulta ser el único atisbo de lealtad en contraposición a su esposa, Zosh Machine (Eleonor Parker), mujer que es egoísmo puro. Parker se luce en el rol de la esposa, cuya invalidez es más psicológica que física.
Las escenas en que Frankie Machine tiene que convivir con su adicción están bien retratadas, sobre todo, si las asumimos como imágenes que provienen de la década más puritana de la sociedad estadounidense: los años 50`. El Hombre de El Brazo de Oro es brutal y desgarradora, además de ser un filme bastante transgresor para su época. El brazo de Frankie Machine es su sobrevivencia, talento y la posibilidad de una mejor vida, pero también representa impulsos incontrolables que son atingentes a cualquier ser humano, en particular, cuando éste toca fondo.
Título original: The Man With the Golden Arm (El Hombre del Brazo de Oro) / Director: Otto Preminger / Intérpretes: Frank Sinatra, Kim Novak, Eleonor Parker, Arnold Stang, Darren McGavin y Robert Strauss / Año: 1955.