En los años 80` la Guerra Fría todavía era una realidad y la posibilidad de un conflicto nuclear entre rusos y norteamericanos era parte de un pensamiento recurrente, el cual podía constatarse en la televisión y en el cine. Hubo películas que mostraban este temor, ya sea por dos países incapaces para ponerse de acuerdo o bien producto de fallas en los sistemas computacionales de misiles. Threads, El Día Después, Testamento y Juegos de Guerra escenificaron en pantalla los miedos de una población que pensaba que podía ser factible la aniquilación mundial. Uno de los títulos que también siguió esta línea fue Miracle Mile, pero desde una aproximación cercana a la comedia negra romántica.
Anthony Edwards, eterno secundario que en los ochenta tuvo algunos protagónicos interesantes como Mr. North y Gotcha!, lideró el elenco de Miracle Mile. En el filme de Steve De Jarnatt interpreta a Harry Washello, un guía de museo algo torpe que conoce a Julie Peters (Mare Winningham). Ambos se enamoran, comparten un día entero, se divierten y se besan entre algunos escenarios de la ciudad de Los Ángeles. Coordinan una cita para la noche, pero Harry se queda dormido. Al final llega al café en donde tenía que pasar a buscar a su novia, pero ésta se ha ido. Frustrado y algo decepcionado por su negligencia decide salir a fumar, acto que se interrumpe por un teléfono público que suena sin parar. Harry contesta la insistente llamada y al otro lado de la línea está lo que parece ser un soldado. Éste le habla palabras sin sentido, pero al final queda claro un mensaje: sólo quedan algunas horas para que se lancen los misiles nucleares, acto que podía acabar con la humanidad o, por lo menos, con una ciudad como Los Ángeles.
Los primeros minutos de Miracle Mile son un truco, una comedia romántica que conduce a los espectadores hacia un relato en el que prima la tensión. El reloj avanza y las decisiones de Harry son pocas, siendo una de ellas el tratar de salvar a su amada. El cineasta Steve De Jarnatt juega con la idea de un protagonista que quizá tomó demasiado en serio un llamado telefónico, el que termina por producir caos entre distintos personajes. El reloj sigue avanzando, pero al final lo que importa es que los jóvenes amantes se reúnan. Es así que las escenas transcurren entre persecuciones, accidentes con la policía y dos personajes principales corriendo a través de las calles iluminadas de una ciudad de Los Ángeles variopinto y que en la noche tiene otro rostro, uno más excéntrico y desenfrenado.
Lo genial del filme de De Jarnatt es que en algún momento se revela que el llamado que recibió Harry era verdad, haciendo que las alternativas de escape se reduzcan al mínimo. Los medios de prensa y servicios de emergencia anuncian el trágico desenlace. Despegan los misiles desatándose el caos vial. Todos pierden el control y la cordura. Pareciera ser que ya se ha extraviado el sentido de todo. Sin embargo, lo único cuerdo que queda es la idea de dos amantes que sólo desean estar juntos durante sus últimos minutos de vida. La puesta en escena en el filme de Steve De Jarnatt, cineasta que también rodó la interesante Cherry 2000 junto a Melanie Griffith, recuerda otras historias sobre personajes excéntricos durante una loca noche. Me refiero a Después de Hora de Martin Scorsese. A pesar de los elementos en común, el filme de De Jarnatt transita por otro camino, ya que aquí la tensión del escape se sustenta en la idea de la búsqueda del ser amado. En la película hay escenas memorables, principalmente aquella imagen de Anthony Edwards subiéndose a los autos cuando se desata el caos social, llevando a los seres humanos a las peores bajezas.
Miracle Mile es vertiginosa, tiene ritmo, mucha tensión, uno de los mejores scores de Tangerine Dream, y a un Anthony Edwards demostrando que podía haber sido aún más loco e intenso que en los mejores papeles de Nicolas Cage. La experiencia de esta película es intensa, debido a que cambia las expectativas de los espectadores a medida que avanza la historia. El reloj es una sentencia, nos oprime y sólo deseamos ver a los dos protagonistas a salvo. Sin embargo, ni lo sentimientos más loables y puros son capaces de sobrevivir al peor de los holocaustos. ¡Un filme imperdible de la década de los ochenta!
Título original: Miracle Mile (también conocida como 70 Minutos para Huir) / Director: Steve De Jarnatt / Intérpretes: Anthony Edwards, Mare Winningham, John Agar, Lou Hancock, Mykelti Williamson, Kelly Jo Minter, Kurt Fuller, Denise Crosby, Robert DoQui y Earl Boen / Año: 1988.