Algunos pueden estar cansados de las 21 veces en que Meryl Streep ha estado nominada al Oscar, pero lo innegable es que se trata de una actriz fenomenal, cuya destreza interpretativa le ha permitido humanizar a sus personajes siempre desde el terreno de la naturalidad y la convicción. En The Post realiza un trabajo sublime al caracterizar a Kay Graham, la dueña y líder del diario The Washington Post. En medio de la filtración de Los Papeles de Pentágono, documento que describía la implicación de Estados Unidos en la Guerra de Vietnam, Graham debe “sacar la voz” en medio de una idiosincrasia machista en donde la igualdad de género era algo impensado.

Desde Munich que Spielberg no hacía un filme con tanto compromiso, antecedente que es muy relevante porque The Post sucede en los setenta, si bien sus mensajes apuntan directamente al momento que hoy experimenta Estados Unidos. Bajo la nueva administración de Donald Trump la sociedad estadounidense ha retrocedido en libertades civiles y sociales. Un clima de desconfianza se ha apoderado de lo que fue la tierra de Thomas Jefferson y George Washington, y que hoy -gracias a los medios de prensa internacionales- está mostrando situaciones que dan cuenta de una censura que no se veía desde los tiempos de Richard Nixon.

The Post rememora la “trilogía de la oscuridad” del desaparecido Alan J. Pakula, la que estaba compuesta por Klute (1971), The Parallax View (1974) y Todos Los Hombres del Presidente (1976), filmes que hablaban de la desconfianza y de las influencias de diversos círculos de poder que usualmente operan en las sombras y lejos del escrutinio público. Eran películas que se sustentaban en el control de agentes gubernamentales y de anónimos hombres que trataban de denunciar lo repudiable. Con The Post, Spielberg muestra a la prensa como el pequeño David que debe hacer frente a un Goliat que se escuda en la manipulación y las amenazas. Es en este agrio terreno en donde Kay Graham debe decidir si imponerse y defender la libertad de prensa o bien seguir siendo la anfitriona encantadora de fiestas junto a personas de dudosa moralidad.

Steven Spielberg desarrolla una obra fascinante sobre el significado de la labor periodística, de aquella que se hacía con sudor y lágrimas contactando fuentes, trabajando más de 24 horas seguidas y sin la ayuda de Internet. En los setenta se produjo más que nunca la búsqueda de la verdad teniendo presente el derecho a la vida y la justicia. Los reporteros de The Post, bajo la batuta de Ben Bradlee (un soberbio Tom Hanks), sabían leer entre líneas. Querían “golpear” como también sucede hoy, pero con una diferencia crucial: la convicción de ser los protagonistas del llamado cuarto poder, una herramienta necesaria para fiscalizar a quienes detentan el poder y conducen a un país como Estados Unidos.

The Post muestra al director de Always más inspirado que nunca. La piedra angular del filme es el diálogo, pero también Spielberg agrega un trabajo de cámara notable. El frame y las relaciones de espacio entre los personajes se transforma en otro lenguaje. Abundan momentos de enorme suspenso, ya sea a través de silencios o de personas que buscan un indicio o respuesta a través de la línea telefónica. Esta es una película que habla de un Estados Unidos que se ha ido consumiendo a partir de los vínculos del poder, y que ya no es el mismo. Hoy se ha desequilibrado la balanza y los mensajes que contiene The Post son algunas advertencias de ello.

Steven Spielberg se ha transformado en un cineasta más reflexivo que visual. Ha cambiado mucho desde los tiempos “hitchkoneanos” de Duelo y Tiburón o desde el director con alma de niño en E.T. El Extraterrestre y en Jurassic Park. Con The Post estamos ante la mirada de un cineasta con más de 70 años que a través de la experiencia busca prevenirnos, a la vez que nos recuerda un tipo de cine de grandes ideales que se conecta directamente con las obras de Frank Capra (Mr. Smith Goes To Washington).

The Post es un filme necesario e importante que mira hacia la Casa Blanca, con o sin Nixon, con suspicacia. Estamos ante una declaración de principios interesante y compleja que no olvida los efectos amargos de quienes sólo desean ocultar la verdad. Estamos ante la obra de un hombre que está incómodo en medio de la sociedad contemporánea, cuyo cine nos recuerda la importancia de promover la diferencia. Ojo con las emocionantes escenas de Kay Graham cuando debe decidir entre arriesgar o la conveniencia, y también cuando camina por las escaleras de un tribunal ante mujeres que identifican el cambio, el avance que toda sociedad sana exige y necesita. The Post es una obra con garra que recuerda el valor de la labor periodística en medio de lo que fue una turbulenta época, como la que vivimos hoy en día.

Título original: The Post (también conocida como The Post: Los Oscuros Secretos del Pentágono o Los Archivos del Pentágono) / Director: Steven Spielberg / Intérpretes: Meryl Streep, Tom Hanks, Sarah Paulson, Bob Odenkirk, Tracy Letts, Bradley Whitford, Bruce Greenwood, Matthew Rhys, Alison Brie, Jesse Plemons, David Cross y Zach Woods / Año: 2017.