Es un alivio ver que talentos como Wes Anderson todavía ven en la técnica del stop motion nuevas posibilidades narrativas. Sus primeros pasos en El Fantástico Sr. Fox (basado en la novela homónima de Roald Dahl) fueron muy celebrados porque fusionó un clásico infantil con sus intereses y estilo como autor cinematográfico). Con Isla de Perros va un poco más lejos con una historia original, la que se sustenta en su admiración por el cine japonés, siendo la influencia más evidente las películas de Akira Kurosawa, además del animé y de varios elementos de dicha cultura.
La historia de Isla de Perros se remonta a una disputa entre dos clanes, entre los amantes de los perros y los fanáticos de los gatos. Años después, los descendientes del clan defensor de los felinos ostentan el poder en la ciudad de Megasaki. Esto da como resultado la expulsión del mejor amigo del hombre a una isla en donde lo único que hay es basura y residuos, los despojos de la sociedad. Todos los perros son condenados producto de un virus que amenaza a los humanos. Es así que los “descartables” terminan por ser aquellos canes indefensos, los que son exiliados a una isla en la que sobra la basura. Tiempo después un precoz niño llamado Atari roba un avión, el que pilotea hasta la isla con la intención de buscar a Spots, su antiguo perro guardián.
En el filme Wes Anderson nos muestra su acostumbrada obsesión por los espacios simétricos y la narración episódica y coral, haciendo que el filme -por tratarse de un trabajo que se sustenta en el stop motion- adquiera un valor mayor como relato vinculado al tratamiento de un cuento, en este caso de una historia con enseñanzas al estilo japonés. Isla de Perros tiene vigor, además de un genuino cariño por el material que se está rodando. Anderson realiza un homenaje al cine de oriente a través de su película, siempre con respeto a las tradiciones y la idiosincrasia japonesa. El director de El Hotel Budapest tiene casi 50 años, si bien sus intereses y su forma de rodar suele tener una visión muy conectada con la sensibilidad de un niño. Los personajes de sus filmes son buenos o malos, santos o pecadores. También hay espacio para los que se arrepienten, a la vez de un sentido de compañerismo, de protección entre diversos personajes. Un ejemplo de ello es el clan familiar de The Royal Tenenbaums o el sentimiento de equipo en The Life Aquatic with Steve Zissou. Desde otra óptica, la forma en que Anderson ordena diversos elementos de sus filmes se parece mucho a la de aquellos cuentos infantiles animados, con diseños muy llamativos y sorprendentes. Usuales colaboradores del director como Bill Murray, Edward Norton, Bob Balaban, Jeff Goldblum y Tilda Swinton también están presentes en la versión subtitulada del filme.
Isla de Perros es un filme conmovedor que también tiene una visión muy humana sobre las estrechas relaciones, incluso de dependencia, entre seres humanos y perros. En el cine japonés es muy común la idea de la honorabilidad, de la lealtad y las promesas, aspectos que son totalmente transferibles a la relación que se da entre canes y sus dueños. Aquella idea es más fuerte en la visión inocente de un niño, en su vínculo fraterno y de dependencia con su perro. Esta es la idea que pone ante nosotros la película hasta el punto de conmovernos en varias escenas. La última película de Wes Anderson es uno de sus más hermosos trabajos. Estamos ante una obra con mucha alma que denuncia la crueldad de los adultos, un oscuro lado que en situaciones termina por convertirse en maltrato y experimentación innecesaria a partir de conspiraciones políticas y sociales. Isla de Perros es una obra que habla de la tolerancia y de la lealtad, una que es a prueba de balas, de hambre, soledad y abandono. Estamos ante una película que habla mucho del cine, de los elementos en común entre la cultura occidental y oriental, y de sentimientos genuinos a través del fascinante arte del stop motion. Atención con el score compuesto por Alexandre Desplat.
Título original: Isle of Dogs / Director: Wes Anderson / Intérpretes: Bryan Cranston, Koyu Rankin, Edward Norton, Bob Balaban, Bill Murray, Jeff Goldblum, Kunichi Nomura, Akira Takayama, Greta Gerwig, Frances McDormand, Akira Ito, Scarlett Johansson, Harvey Keitel, F. Murray Abraham, Yoko Ono, Tilda Swinton, Ken Watanabe, Fisher Stevens, Liev Schreiber y Courtney B. Vance / Año: 2018.
