Netflix está sacando buenos dividendos con Bird Box, una de sus últimas apuestas en esta exitosa plataforma de streaming y que esta vez centra su historia en el apartado de aquellas películas que hablan sobre el fin del mundo. Sandra Bullock protagoniza el filme en el rol de Malorie, una mujer en apariencia autosuficiente, embarazada y que parece no muy fascinada con la idea de ser madre soltera. Su hermana la lleva a un control médico, pero antes de partir vemos en un televisor que algo raro está sucediendo en Rusia y en otros países, lo que incluye suicidios masivos sin razón aparente. Ya en el hospital nos vamos enterando de las ansiedades de Malorie, quien al término del chequeo médico presencia lo imposible. La misma reacción que antes se estaba transmitiendo por televisión en Europa ahora se está produciendo en suelo estadounidense. En pocos minutos se desata el caos, suicidios y personas corriendo por todos lados que ven algo invisible, una fuerza desconocida que comienza a catalizar acciones impensadas. Luego del caos quedan los sobrevivientes, las conjeturas sobre la debacle de la sociedad, las teorías sobre el fin de los tiempos y momentos en cámara que se van alternando con la protagonista y dos niños viajando en bote por un río.

Bird Box se gesta en la tradición de las películas de cine B sobre el fin del mundo, además de tener otras referencias, entre ellas, la malograda El Fin de los Tiempos de M. Night Shyamalan y, principalmente, The Last Man on Earth de Ubaldo Ragona y Sidney Salkow (basada en la novela I Am Legend de Richard Matheson). El filme de Netflix tiene buenos momentos de suspenso, además del clásico grupo de sobrevivientes aislados en una casa. Entre estos se pueden apreciar diferencias y grados de empatía en medio del fin de la civilización. Otro aspecto interesante es cierta profundidad en la historia de Malorie, quien es básicamente una mujer que está a punto de traer vida a una realidad en donde la gente se mata. Aquella dualidad proporciona algunos matices a esta historia, lo que se debe en gran medida a su directora, la cineasta danesa Susanne Bier, quien en sus películas (In a Better World, Amor es Todo lo que necesitas, Brothers) ha retratado con periodicidad las problemáticas familiares ante situaciones tanto cotidianas como extraordinarias. A ello se suma la sensibilidad de la mujer, ya sea en su rol de esposa o madre. Bier se ha especializado en el melodrama, pero siempre desde un punto de vista costumbrista sobre las dinámicas interpersonales.

En Bird Box, Susanne Bier demuestra que es capaz de manejarse con pericia en el terreno de la acción. El suspenso está garantizado y aunque algunas escenas son un poco desconectadas unas de otras, el filme resulta una experiencia adictiva gracias a la notable interpretación de Sandra Bullock. La actriz representa la idea de una madre que aún en el fin de los tiempos reniega parte de su maternidad, a la vez que su espíritu de sobrevivencia se antepone y la humaniza ante la tentación de mirar hacia lo desconocido. También la idea de taparse los ojos, de no poder ver nada nos conecta como espectadores con la pérdida del sentido más relevante para el ser humano, teniendo como única excepción a los lunáticos.

En 2008 el director Fernando Meirelles exploró la posibilidad de la extinción de la sociedad a partir de la ceguera con Blindness (basada en una novela de José Saramago). Esta obra era mucho más cruda que Bird Box porque mostraba a hombres y mujeres en un estado de primitivismo en donde lo único relevante era poder satisfacer algunas necesidades esenciales, entre ellas, alimentarse, dormir o tener sexo. La película de Bier no es tan cruda como la obra de Meirelles. Sin embargo, también nos sitúa ante un escenario que es más adverso en comparación al terreno común de un ataque extraterrestre. En el mundo de Bird Box no se puede luchar o pelear con armas, no sabemos bien quién o qué es el enemigo, no hay razones y sólo está el antecedente de la gente que se mata sin motivos. Esto hace de la propuesta de Netflix un filme interesante y perturbador. Este es su gran aporte, la de mostrar al ser humano en una forma tan aislada y tan desprovista de cualquier tipo de solución, algo que trató con mayor habilidad John Krasinski en la notable Un Lugar en Silencio. Bird Box es una película interesante a pesar de sus defectos y excesos, ya que habla de la maternidad cuando queda muy poco de aquellas cosas que hacen sentido o que son parte de nuestras vidas. Atención con una de las caracterizaciones más insoportables de John Malkovich.

Título original: Bird Box / Director: Susanne Bier / Intérpretes: Sandra Bullock, Trevante Rhodes, John Malkovich, Sarah Paulson, Jacki Weaver, Rosa Salazar, Danielle Macdonald, Lil Rel Howery y BD Wong / Año: 2018.